Cristina a la vigilia militante: “Vayamos a descansar un poco”

La Vicepresidenta intentó calmar el ánimo de quienes se apostaron en Juncal y Uruguay para hacerle llegar su apoyo, pese a los incidentes con la Policía porteña.

En un discurso improvisado en plena calle, la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner pidió una pausa a los militantes que mantienen una vigilia alrededor de su departamento. Tras los incidentes entre algunos militantes y la Policía Metropolitana durante la tarde -que dejaron un saldo de 12 oficiales heridos y, al menos, 4 manifestantes detenidos- la líder del Frente de Todos bajó hasta la vereda pasadas las 22 de este sábado, junto a algunos colaboradores y llegó al escenario improvisado a la salida de su departamento. Cerca de ella, el secretario de Derechos Humanos de la Nación, Horacio Pietragalla, “organizaba” la calle mientras otros funcionarios bonaerenses estaban en el lugar desde la tarde.

“Muchas gracias a todos, a los que me cuidan la espalda… Gracias”, comenzó Fernández de Kirchner, antes de cuestionar el accionar policial y el del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, tanto por el vallado que había instalado en las últimas horas como por el uso de gases lacrimógenos ante los disturbios durante la tarde.

“Desde el día martes, cuando el Partido Judicial pidió 12 años de condena por cada año -en alusión al pedido del fiscal Diego Luciani en el marco de la causa Vialidad-, se produjeron a lo largo y a lo ancho del país manifestaciones espontáneas de compatriotas. En el único lugar en el que hubo escenas de violencia fue en la Ciudad de Buenos Aires, en la puerta de mi casa”, fustigó Cristina Kirchner.

Según consideró, el operativo policial fue “provocado por ‘el odio hacia la alegría y el amor peronistas”. “Odian el amor y a los peronistas, que siempre hemos sido objeto de la violencia”, clamó.

“No es cierto que estaban todo el día: era a la mañana y a la tarde, y no para insultar a nadie”, aseveró Cristina, en defensa de los militantes del FDT que se apostaron en el barrio de Recoleta para acompañar a su líder política.

Pausa y descanso

La titular del Senado pidió que los manifestantes bajen la intensidad de la vigilia. “Vayamos a descansar un poco, ha sido un largo día”, les aconsejó, luego de agradecer su acompañamiento. “Aunque viviera mil años nunca me va a alcanzar para agradecerles el amor, la solidaridad y la lealtad de todos ustedes”, confió. “Créanme que a esta altura de mi vida no hay nada más que eso”, afirmó.

Mensaje a la oposición

Además de las críticas que realizó contra las autoridades porteñas -apenas minutos después de que el jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta se refiriera a los incidentes-, la Vicepresidenta dejó un fuerte planteo a la oposición: “Ahora que se vienen las elecciones, dejen de competir entre sí para ver quién odia más y quién le pega más al peronismo”.

“Desde el último día que fui presidenta de todos los argentinos hasta el día martes, quien habla ha sufrido permanente hostigamiento y amenazas de muerte”, acusó la Vice. “Nunca vi a la Policía de la Ciudad de Buenos Aires”, reclamó. “Soy ciudadana y pago mis impuestos como todos los que están acá. Tengo los mismos derechos, ninguno más”, siguió. “Y después dicen que los violentos somos nosotros…”, ironizó Fernández de Kirchner. “Es increíble el grado de cinismo y perversión... Negar el peronismo. Es lo que siempre quisieron, desde siempre”, sentenció.